"Y he aquí que toda la ciudad salió al encuentro de Jesús y, en viéndole, le rogaron que se retirase de su término" Mt 8, 28-34. La gente se molesta porque Jesús había librado a unos endemoniados y los demonios habían entrado en los puercos, que se tiraron al mar. ¿Hemos experimentado que la presencia de Dios nos resultado molesta en nuestra vida y hemos dejado de lado sus mandamientos, palabras o sugerencias?
miércoles, 2 de julio de 2014
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
0 comentarios:
Publicar un comentario