PRIMER DOMINGO DE ADVIENTO – CICLO B
Monición de entrada
Paz y Bien. Favor de apagar sus celulares.
Comenzamos un nuevo ciclo litúrgico, orientado a revivir otra vez espiritualmente los misterios de la Historia de Salvación. Durante estos cuatro domingos, llamados de adviento, la Iglesia va a tratar de despertar en nosotros el deseo de una presencia mayor de Dios. Los signos externos del color morado y de la corona de adviento nos recuerdan la esperanza de la luz, que es Cristo, en una vida austera, para que su nacimiento nos encuentre vigilantes y renovados. Abramos las puertas de nuestro corazón a estos misterios, como lo hizo María, el ejemplo perfecto de quien espera al Mesías.
Monición a la 1ª lectura – Isaías 63, 16-19; 62, 2-7
El profeta Isaías nos invita a sentir en nuestros corazones la necesidad de Dios, la necesidad de acercarnos a Él como la única fuente de vida, como nuestro padre y redentor. Escuchemos.
Monición al salmo 79
Con el salmo que rezamos a continuación hacemos nuestra la oración de la Iglesia, pidiendo a Dios que nos haga experimentar su salvación.
Monición a la 2ª lectura – I Cor 1, 3-9
Sabiendo que Dios es fiel a sus promesas, san Pablo nos invita a renovar nuestra esperanza en la manifestación de Nuestro señor Jesucristo. Escuchemos.
Monición al Evangelio – Marcos 13, 33-37
Pone el evangelista en labios de Jesús una exhortación a vivir siempre en vela; en vela porque Dios nos visita de muchas formas y podemos estar distraídos.
PRECES DE LOS FIELES
SACERDOTE: Con toda la confianza de nuestro corazón que espera las promesas de salvación y renovación espiritual del adviento se hagan realidad en nosotros y en el mundo, nos dirigimos con fe a nuestro Dios.
Respuesta: Ven, Señor, no tarde.
-Por la Iglesia, para que sea renovada y rejuvenecida con la celebración del adviento para ser la buena nueva de salvación para nuestro tiempo. Oremos.
-Por el mundo entero y sus gobernantes en particular, para que todos seamos responsables de crear un mundo nuevo en justicia y paz. Oremos.
-Por todos los que en nuestro mundo viven sin esperanza, trabajan sin entusiasmo o sufren en soledad, para que el adviento traiga a su vida la esperanza y el amor paterno de Dios. Oremos.
-Por nosotros y por todos los que esperamos el nacimiento espiritual de Cristo en Navidad, para que, recibiendo sus dones celestiales, seamos sus testigos en este tiempo. Oremos.
Sacerdote: Padre bueno, que por amor nos envías a tu hijo muy amado, prepara nuestros corazones para recibirlo y dejarnos santificar por él. Por Cristo N. Señor.
AVISOS:
1. El próximo domingo es la kermess parroquial, con ocasión de la fiesta patronal de la Inmaculada. Todos están cordialmente invitados a participar y convivir, al mismo tiempo que ayudan en los proyectos sociales de la Parroquia.
2. No se vayan sin llevarse un ejemplar del Boletín parroquial de este mes de diciembre, donde encontrarán amplia información sobre las fiestas navideñas y el adviento.
Monición de envío
Después de revivir en nuestros corazones la luz de la esperanza en preparación a la Navidad, volvamos a nuestra vida, atentos a que esta luz pueda iluminar todas nuestras actividades y experiencias en la semana.
